¿Observas que por más que limpias el baño nunca termina de quedar como quieres? Probablemente limpies algunas zonas de forma incorrecta.
En Alcasa hemos recopilado algunos de los trucos que utilizamos para que nuestros baños estén siempre limpios y relucientes.
1. Si eres un poco desordenado, lo primero que tienes que hacer es ver qué objetos ajenos al baño están ocupando espacio y estorbando. Lo más importante que debes hacer es sacarlos todos.
2. En segundo lugar, quita las alfombras y todos los recipientes y demás objetos que tengas sobre los muebles o sobre el lavabo. De esta forma, sin nada en medio, harás el trabajo mucho más rápido.
3. Una vez desalojado el baño, lo primero que tienes que hacer es fregar los azulejos, las ventanas y el techo. Si observas que hay moho, límpialo con agua y lejía con la ayuda de un estropajo o una bayeta. Esto es lo primero que se debe hacer para así evitar que la suciedad caiga sobre el resto de elementos ya limpios.
4. Posteriormente, limpia el interior del inodoro. Echa lejía o cualquier otro desinfectante sobre él, y con ayuda de la escobilla limpia bien todo su fondo.
5. Para la ducha o bañera, echa sobre sus paredes, grifos y cabeza de la ducha el producto de limpieza con el que mejor trabajes y déjalo reposar durante 2-3 minutos. Transcurrido este tiempo, friégalo bien con un estropajo, posteriormente, enjuágalo bien con agua muy caliente y sécalo todo con una toalla, así evitarás que queden marcas. Si quieres que el grifo quede con más brillo, en vez de secarlo con una toalla normal, hazlo con papel. Para la mampara, lo ideal es mezclar vinagre con bicarbonato sódico, echarlo y dejarlo reposar durante 15 minutos. Transcurrido este tiempo, acláralo con una esponja húmeda.
6. Limpia el lavabo y el mueble que lo rodea. Deshazte de los restos de cal, jabón y pasta de dientes con un estropajo. Si hay rastro de suciedad en lugares poco accesibles, utiliza un cepillo de dientes, te permitirá llegar a loas zonas más escondidas.
7. Para los muebles, simplemente límpialos con un estropajo con agua templada y jabón y, posteriormente, acláralo con una bayeta.
8. Para la parte externa del inodoro, haz igual que con el lavabo, pero recuerda que es recomendable utilizar otro estropajo para así evitar que los gérmenes vayan de un lugar a otro.
9. Los espejos, los grandes odiados por muchas personas. Mezcla agua tibia con vinagre y frota con papel de periódico. Una vez haya quedado limpio, coge otra hoja de periódico seca y vuelve a pasarla hasta que se elimine toda la humedad.
10. Por último queda el suelo del baño. Es la parte más rápida y sencilla. Bárrelo para recoger pelos, papeles o lo que pueda haber caído durante la limpieza. Una vez limpio, pasa la fregona con agua caliente, jabón y lejía. Acláralo y tu baño estará listo.
Esperamos que nuestros consejos os sirvan de ayuda. Pero queremos conocer vuestros “trucos caseros” para tener un baño perfecto, ¿cuáles son vuestros favoritos?